Publicación a la vista

Escrito por las patitas de Cucaracha en su guarida martes, julio 30, 2013

Lo he hecho. Todavía no entiendo cómo he acabado tomado esta decisión, pero ahí está. No sé cómo esa idea remota (que antes me parecía desconocida, insondable, me daba miedo y además ni siquiera constaba en mi listado de opciones) ha acabado por convertirse en un futuro cercano y real que ya está tomando forma; supongo que la vida da muchas vueltas, y tu forma de ver el mundo gira con ella. 
Como no quiero ponerme mística ni marear la perdiz, os lo cuento ya; luego tendré tiempo y espacio para extenderme acerca de mi decisión. Señores y señoras...

Me voy a lanzar a autopublicar una novela.

Se trata, como hablé hace poco en este mismo blog, de la novela corta Ontromus, que ya terminé y corregí hace meses. ¿Por qué, así de pronto, he decidido editarla y publicarla por mi cuenta? Ha sido una larga historia en la que se han visto involucrados múltiples factores. Como ya he dicho, yo antes jamás me había planteado la idea de buscarme yo sola las habichuelas, editando un libro mío "con el sudor de mi frente". Pero el hecho de saber que realmente existe gente a la que les gustaría leer mi obra (tanto aquellas que sintieron interés a raíz del cortometraje como otras que, simplemente, tienen curiosidad por mis escritos), y de sentir que de verdad puedo hacer llegar mi novela a la gente con mis propias manos, me hizo replantearme la posibilidad. Supongo que la decepción editorial que sufrí a principios de este año también me ayudó a considerar otras alternativas y a sopesar otros caminos que, de otra forma, nunca habría tenido en cuenta. El caso es que, en mitad de mis habituales búsquedas de posibles editoriales interesadas (búsquedas fallidas, como de costumbre), me detuve totalmente seducida por este nuevo camino. Ni siquiera quise seguir buscando, sino que emprendí directamente la vía de la autopublicación. 

No digo que vaya a dar la espalda al mundo editorial: de hecho me encantaría encontrar algún día una oportunidad de trabajar con una. Pero, de momento, mis objetivos respecto a la literatura se contentan con este pequeño proyecto que tengo entre manos. ¿Quiero fama o dinero? Pues no, no pretendo llegar y besar el santo. No mentiré diciendo que no me gustaría vivir de lo que escribo (¿quién no querría poder vivir dedicándose a algo que le encanta?), pero soy consciente de que no puedo ni mucho menos empezar de esa manera. 

Por el momento lo que quiero es que la gente que tenga interés en leerme pueda hacerlo; quiero ofrecer mi obra al mundo, empezar a darla a conocer y que llegue a quien tenga que llegar. Y no me conformo con hacerla llegar de cualquier manera; tengo cierta vena coleccionista con los libros físicos, y yo quiero ofrecer lo mismo que tanto me gusta conseguir. Es por eso que prefiero ir más allá de, simplemente, colgar la novela en internet (que también estará disponible en formato de libro electrónico) y voy a ofrecer la oportunidad de obtenerla en formato papel. Por un precio bajo, eso sí, que la crisis pega fuerte.

Así que nada, aquí me hallo ahora mismo inmersa en este nuevo reto. Tengo que mencionar que estoy contando con la ayuda incondicional y desinteresada de varias personas que se merecen el cielo, y estoy viendo que voy a quedar muy contenta con el resultado. No puedo dar una fecha exacta (por ahora ni siquiera aproximada) del lanzamiento; ya iré contando más cosas a medida que la edición avance. Pero, la verdad (aunque lo digo con la boca pequeña porque no puedo saber qué obstáculos me voy a encontrar), no creo que el libro salga a la luz mucho después del final de este verano.

Estoy muy ilusionada con todo esto. Espero lograr, y no sólo por la narración en sí sino también por el acabado completo, un libro que deje satisfecho al lector. Seguro que todo el esfuerzo merecerá al final la pena.

Pronto, más noticias. Hasta entonces... 

¡Nos vemos!