Novedad editorial: Días sin fin (Sandra C. Gallegos)

Escrito por las patitas de Cucaracha en su guarida lunes, junio 20, 2011

¡Muy buenas! Hoy me paso para anunciar una nueva publicación, de mano de la joven autora Sandra C. Gallegos, más conocida en la bloggosfera por el nombre de Azahara. Para quienes no la conozcáis, Sandra también ha publicado con anterioridad la novela Magia Medieval, aparte de estar trabajando en otras novelas, algunas de las cuales podemos leer en su blog. La verda, basta con echarle un vistazo a sus obras para darse cuenta de la versatibilidad de la autora, que puede escribir sobre temáticas muy diversas sin despeinarse. De esta forma, mientras que con su primera publicación, Magia Medieval, nos ofrecía una historia fantástica ambientada en la edad Media, con su segunda publicación Días sin fin nos trae una trama policíaca con mucha pinta de contener buenas dosis de acción y romance.

Como he dicho, la novela ya está disponible y puede ser pedida en cualquier librería o directamente comprada a través de la web de la editorial, así que os animo a echarle una ojeada. Os pongo la información general:




  • Título: Días sin fin
  • Autora: Sandra C. Gallegos
  • Editorial: JavIsa23
  • Precio: 16 €
  • ISBN: 978-84-939087-0-6
  • Páginas: 330 
  • Sinopsis:
Richard Hatch, un peligroso criminal líder de una banda de secuestradores y asesinos, se ha encaprichado de Rachel Rivers, una bella inspectora de policía que tiene encandilados a varios hombres; entre estos se encuentra Brian Kelley, compañero de trabajo de la muchacha y amigo de su hermano mayor, Dave Rivers. La misión de los dos jóvenes inspectores consistirá en evitar que Richard Hatch lleve a cabo su propósito de secuestrar a Rachel... pero las cosas se complicarán considerablemente al producirse un atraco en la comisaría, liderado por el propio Richard Hatch.
Brian visitará la muerte muy de cerca. Dave estará a punto de morir víctima de una brutal paliza. Rachel se verá obligada a obedecer los deseos y órdenes del criminal Hatch. Adam Rivers, hermano mayor de Dave y Rachel, será el único que permanezca eternamente optimista y levantando los ánimos de los suyos.
Pero incluso él lo tendrá difícil para sobrevivir.


Bueno, la novela pinta muy bien y espero que tenga éxito en el mercado editorial. ¡Mucho ánimo desde aquí a la autora! ^^

Por ahora nada más, así que... ¡Nos vemos!

Los 4400

Escrito por las patitas de Cucaracha en su guarida viernes, junio 17, 2011


No sé si alguien se acordará de esta serie. Recuerdo que hace un tiempo emitieron la primera temporada en forma de recopilatorio, recortando y fusionando capítulos. De hecho, creo que llegué a ver por la televisión hasta la segunda temporada; si luego la emitieron por completo, yo no llegué a enterarme.
Pero yo me había quedado con la intriga y con las ganas de seguir disfrutando de ese tono de ciencia ficción, misterio y un dejo de futuro apocalipsis que caracterizaba a la historia. Me pareció una serie que pisaba fuerte, y no entendía cómo pudieron suspenderla. Así que acabé por verla entera en internet; al parecer, sí que llegó a doblarse por completo al español, pero no tengo ni idea de si llegaron a emitirla entera en alguna cadena.

En fin, Los 4400 comienza con un extraño acontecimiento sucedido, cómo no, en los Estado Unidos (En serio, ¿no hay más sitio en el planeta?): un meteorito que se dirige directamente hacia la Tierra es detectado, y todos los intentos por evitar la colisión resultan en vano. Pero, repentinamente, el "meteorito" comienza a mostrar un comportamiento anómalo; reduce considerablemente la velocidad y desciende con suavidad hasta la superficie de un lago, como si aterrizase sobre sus aguas, presentando un aspecto de bola de luz gigante. Entonces, 4400 personas aparecen de la misterosa esfera luminosa; se trata ni más ni menos que de 4400 desaparecidos en todos los lugares y épocas, conservando la misma edad y aspecto de entonces y sin recordar nada de lo que les ha ocurrido después de su desaparición.

Bueno, antes de seguir hablando de la serie, aviso que el siguiente texto contiene grandes spoilers.


Gracias, Leonard (XD).

En fin, después del misterioso suceso y el estupor general, empieza el caos: ¿qué hacemos ahora con toda esta gente, que ha salido de la nada? ¿Cómo es eso de desaparecer hace meses, años o décadas y regresar ahora intactos, como si no hubiera pasado ni un solo día? Las incógnitas y la necesidad de controlar la situación desemboca en el aislamiento de los 4400 individuos para su investigación. Cuando al fin el furor se apacigua, son puestos en libertad y éstos intentan volver a sus vidas anteriores, algo que en muchos casos resulta imposible debido al paso del tiempo.
Sin embargo, muy pronto comienzan a surgir hechos insólitos: algunos 4400 empiezan a mostrar ciertas habilidades paranormales de las que no tenían consciencia; clarividencia, fuerza sobrehumana, capacidad curativa... Muchos de esos casos suponen un peligro obvio para la sociedad, que empieza a temer a los regresados. Por otro lado, existen otras habilidades que, lejos de suponer un peligro, pueden usarse como una herramienta beneficiosa para la humanidad e incluso el planeta. ¿Qué fin tienen, pues, los extraños dones otorgados a los 4400?
En mi opinión, la serie tuvo un comienzo muy convincente que dejaba entrever un desarrollo aún mejor. Las primeras temporadas se centran en la labor policial de los agentes Diana Skouris y Tom Baldwin (Dos co-protagonistas comañeros de trabajo que, tengo que decirlo porque es insólito, no acaban juntos ni llegan a mantener ninguna relación sentimental), al cargo de la vigilancia de estos 4400 reintegrados en la sociedad, mostrándonos los casos de habilidades paranormales que van surgiendo y los efectos de éstas en el entorno de los personajes. Mientras, se desarrollan las historia de fondo de otros personajes con protagonismo. Tenemos a la primera desaparecida de todo el colectivo 4400, y una de las caras de la serie; Maia, una niña clarividente que acaba siendo adoptada por la agente Skouris. Por otro lado está la historia del hijo de Tom, Kyle, que cayó en coma meses atrás del comienzo de la serie, mismo día en el que su primo Shawn, que iba junto a él, desapareció en extrañas circunstancias. Por supuesto, Shawn es uno de los 4400 aparecidos, y Tom tiene la esperanza de que pueda arrojar algo de luz sobre lo que le ocurrió a su hijo.  Aparte, tenemos a Lily y Richard, dos 4400 que, ante la imposibilidad de volver a sus anteriores vidas, comienzan una nueva juntos. Al principio no parecen poseer ninguno de esos dones extraordinarios; sin embargo, cuando Lily descubre que quedó embarazada poco después de su desaparición, comienza a experimentar sensaciones extrañas que parecen emanar del bebé que incuba en su interior. Desde luego, el bebé da bastante la lata, porque más adelante resulta ser un factor clave.
La serie me gustaba, como he mencionado, porque a pesar de no contener un drama apocalíptico y una lucha por la supervivencia de la humanidad, es una constante insinuación de una bifurcación en la que un camino conduce a la destrucción de nuestro mundo a causa de la inconsciencia humana, y el otro hacia un profundo cambio que permitiría mejorar las cosas y mantener la vida en el planeta a pesar de los seres humanos. Los 4400 son la herramienta para ello, enviados por los científicos de ese futuro desolador a un pasado en el que todavía es posible la salvación. Me gusta ver el desarrollo de los acontecimientos, cómo la sociedad va acogiendo a los 4400 y las diversas reacciones hacia ellos, desde la adoración hasta el rechazo extremista. Y cómo poco a poco, algunos van comprendiendo que el extraño fenómeno de los desaparecidos puede transformar la realidad existente a mejor.
Otro aspecto que me gustó de la serie fue todo el fenómeno que rodea al personaje de Jordan Collier; comienza siendo un bondadoso 4400 fundador de una asociación que brinda hogar y protección a los reaparecidos desamparados ante el rechazo social. Pero a lo largo de la trama, se producen cambios en la percepción que se nos da de él; uno no llega a adivinar si sus intenciones son realmente buenas o malas, si detrás de su fanatismo (acentuado en la última etapa de la serie, donde se lo presenta como una especie de nuevo Jesucristo. Como curiosidad, ¿podemos considerar que ambos comparten las iniciales, J.C.?) existe un real deseo de llevar el poder de los 4400 hacia la cumbre de la humanidad para salvarla, o tan sólo es un hambre voraz de poder. Sea como sea, no se puede negar que es (pienso yo) el personaje más interesante de la serie.
Y, como otro personaje poderoso, tenemos a la que yo considero la gran cagada de la serie: Isabelle, la hija de Richard y Lily. No cuando aún estaba por nacer ni cuando era tan solo un bebé; creo que entonces constituía una subtrama con fuerza e intriga, pues el bebé prometía tener algún tipo de poder superior que nos mantenía en vilo. Donde creo que a los guionistas se les fue la olla fue cuando Isabelle sufrió ese "crecimiento instantáneo", convirtiéndose en adulta de la noche a la mañana literalmente, robando para ello la vida de su madre, que queda convertida en una anciana y muere al poco tiempo. No solo creo que es un final mediocre para una de las protagonistas de la serie, pues esto no me hubiera parecido tan grave si hubieran sabido llevar el personaje de Isabelle adulta a buen puerto. Pero, insisto, creo que la cagaron completamente; a partir de entonces empezaron a hacer que la trama girase entorno a ella, un personaje que ni cae en simpatía ni, simplemente, transmite nada. Me parece que entonces se perdió la personalidad propia de la serie y la cosa decayó bastante. Por suerte, debieron de darse cuenta del bajón porque, más o menos, al final intentaron restaurar la trama y dirigirla hacia un punto más o menos parecido al que se dirigían en un principio.
Bueno, también hay alguna cagada más por ahí suelta, pero sin mucha transcendencia. Me acuerdo ahora del personaje de Alana: la introducen en un extraño capítulo que prometía un giro vertiginoso en la trama en el que Tom era el protagonista, y al final te das cuenta de que tan sólo ha sido un episodio metido con calzador para buscarle una esposa nueva a Tom. También debieron de darse cuenta de que Alana no pintaba nada ahí en medio, porque más adelante se la quitaron de encima de una forma tan tonta (o más) que la manera en que había llegado. Rectificar es de sabios, supongo, pero quedó de un cutre impresionante.
En resumen, salvando los aspectos que menos me gustaron y esa ida de olla en las temporadas intermedias (no sólo con respecto a Isabelle, sino con la historia en general), me llevé un buen recuerdo de la serie. Nos dejó con un final muy abierto, inconcluso (con una canción de fondo que, por cierto, me hizo tener interferencias con El club de la lucha XD), pero que dejaba muchas papeletas hacia ese futuro dominado por los 4400. Creo que fue una buena elección no seguir adelante y terminar la historia en ese punto; como he dicho, creo que el punto fuerte de Los 4400 es la insinuación. Mostrar cómo el mundo se transforma bajo los poderes de éstos sólo la estropearía y acabaría con su esencia.
Supongo que ya se puede cerrar el "marco spoiler". 



Conclusión: serie recomendada, le pongo el Sello de Calidad Cucaracha. 
Lo mejor: las primeras temporadas hasta el crecimiento de Isabelle, resaltando la segunda. Por supuesto, me dejo muchas cosas buenas en el tintero, como el doctor Kevin Burkhoff, la idea de la inyección de la promicina con un cincuenta por ciento de probabilidades de sobrevivir... Pero, para todo ello, recomiendo verla entera; no se hace pesada. 
Lo peor: la subtrama de Isabelle. Dios, me siento como si la estuviera poniendo a parir (de hecho, lo estoy haciendo), pero no deja de chocarme que estropearan una serie que podría haber sido impecable con un personaje así. 
Os dejo el video de la introducción, con una canción y unas imágenes muy acordes con el espíritu de la historia.



Bien, este es mi primer post de las vacaciones, esta vez de verdad. Espero poder actualizar con bastantes más cosas antes de mediados de julio, pues me voy de viaje durante un mes y no sé si podré seguir con el blog hasta que vuelva. Pero mientras tanto, feliz verano y... ¡Nos vemos!



"So long ago, another life,
I can feel your heartbeat.
It's not a dream, remember us...
I can see it in your eyes.
We'll find our place in time, a place in time beyond the sun.
We'll find our place in time, a place in time to call our own..."

Amanda Abizaid, A place in time.

¿Huele a... libertad? (Nuevo premio + Encuesta)

Escrito por las patitas de Cucaracha en su guarida viernes, junio 10, 2011

Acabo ya el penúltimo examen y me siento casi como si acabara de salir de la cárcel. ¡Que ya estoy a las puertas de las vacaciones! Me va a costar acostumbrarme... Bueno, me costará el primer día, y tal vez también el segundo. Después del tercero, se me olvidará lo que es sufrir y poco a poco se evaporará el éxtasis del principio... Joder, qué mal, ¿qué hago ya pensando en eso si ni siquiera han empezado de verdad mis vacaciones?
El día 14: el martes 14 es de verdad el pistoletazo de salida. Mi verano no empieza el 21 de junio, ni cuando le da la gana a El corte inglés; empieza el día siguiente al último examen, cuando puedo quedarme durmiendo hasta las tantas para recuperar las horas de sueño perdidas en las últimas semanas. Cuando amontono todos los apuntes del curso "por si acaso tengo que consultar algo otro año" y al final nunca los vuelvo a mirar. ¡Argg, voy a parar, me estoy muriendo de envidia de mi yo-futura!

A lo que iba; en cuanto termine, y cuando pueda, actualizaré La cadena de Temporibus (si no se apunta antes nadie más... ¿Alguien se anima? ¿Voluntarios? ¿Saskia? xD). La verdad es que me muero por tener tiempo para escribir. Me ha vuelto a pasar lo de siempre, lo típico, eso de que la inspiración llega con todo su poderío justo cuando más estresado estás. Cientos de ideas de golpe. Lo difícil ahora va a ser ponerlas en orden y hacer algo decente con ellas. Ya veremos qué pasa.

Para no enredarme más en mis cosillas, paso al tema del día. ¡Otro premio para el blog! Éste me lo ha dado (me encanta tu nombre de usuario *.* va en serio), desde su blog Love is always very funny. Siento haber tardado tanto en ponerlo. ¡Muchas gracias! ^^




A verrrr... Las reglas...

  1. Colocar la entrada en nuestro blog, y agradecerle a la persona que nos ha dado el premio. Hecho.
  2. No quitar el link de: http://www.caprichitosusagui.blogspot.com/. Pues ahora lo quito, hala. Bueno, mejor no. Vale, ya sigo, baja esa pistola.
  3. Responder a la pregunta de la persona que te lo ha dado, y escribir una nueva para los siguientes blogs.
En este caso, la pregunta de Fusas ha sido la siguiente:

¿Por qué te gusta escribir?
Pufff... con esta pregunta podría extenderme páginas y páginas. Más que nada porque no sé bien qué contestar, y lo único que podría hacer sería cavilar sobre la raíz de el motor que mueve mi vida. Porque sí; escribir es algo así como un pilar, como algo imprescindible que nació conmigo y que siempre ha enmarcado mi identidad. Podríamos resumirlo en una frase: me gusta escribir porque escribir soy yo, porque no habría yo sin escribir. Porque si dejara de escribir, me convertiría en mis propios restos. Espero que se haya entendido lo que quiero expresar.

Proseguimos. Tengo que hacer ahora una pregunta que los nominados tendrán que responder. ¡Eh, me gusta esto! Os puedo poner en un compromiso, ¿sois conscientes? Me entran ganas de hacer maldades... 
Nah, mejor elijo una pregunta simple, pero que hace que me pique la curiosidad:

¿Qué expresiones o frases sueles usar una y otra vez cuando hablas?

Pueden salir cosas interesantes de esta pregunta...
Pues la lista de premiados en esta ocasión es... *redoble dramático*

  • Saskia y su Saskia-site (¡Por fin, hija, por fin! Tenía una cuenta pendiente XD)
  • Calipso bajo el hayedo y su diario de ídem (Te has convertido en el blanco de todos los premios, ¡Muajajaja!)
  • Herneith y su The Age of Translation (para cuando le dé por volver a la bloggosfera ¬¬)
  • Azahara y sus blogs  Música y libros y Aprendiz de escritora (Los sigo mucho y me he dado cuenta de que nunca les he dado un premio O.o)
  • Natalia de Orellana y su Sala de los sueños (igual que con Azahara)
  • Lau y su Locura pasajera (parece que también anda ausente últimamente)
  • Lu. y su Peor que el Olvido, fue volverte a ver...
  • Antarinith con su Un libro bajo la almohada.
Y si me dejo a alguien en el tintero, ya sea porque le hace ilusión responder a la pregunta o por alguna otra retorcida razón, lo de siempre: que me avise y modifico, o que coja el premio sin permiso. ¡It's free!


¡Siguiente punto del día!
Siempre he querido poner una encuesta en mi blog sobre esas dudas existencialmente tontas que me entran a veces, pero a la hora de ponerlas se me olvidaban o las encontraba demasiado existencialmente tontas incluso para un blog escrito por una cucaracha, que ya es decir. Pero al final la duda ha podido conmigo y he decidido ponerla. Así que ahí tenéis la cuestión:

¿Piratas o vikingos?

Yo ya he respondido. ¿Qué prefieres tú?

Pues nada, monadas. Ya volveré con más cositas. Reseñas, anécdotas, recomendaciones de libros, películas, series y música... Incluso puede que me venga la inspiración y siga con la sección de "Cosas cotidianas que...", que la tengo muy abandonada. Hasta entonces...

¡Nos vemos!

Feria del libro + Palabras envenenadas (Maite Carranza)

Escrito por las patitas de Cucaracha en su guarida jueves, junio 02, 2011

¡Eo! Escribo en mitad de mi primera semana de exámenes finales. No creo que vuelva a escribir en el blog hasta que los termine. Pero me animo al pensar que después de este par de semanas trabajando al 120% vendrán días libres, yo dejaré de quejarme y tendré tiempo para escribir, leer, salir y disfrutar del solecito, tocar, hasta hacer puenting si se tercia... En general, hacer lo que me venga en gana y cuando quiera, ¡vivir mis ansiadas vacaciones de verano! Puf, creo que en momentos como éstos es cuando más valoro mi tiempo libre y cuando más bella e idealizada veo la vida que reluce en el exterior de mi guarida, más allá de mi montaña de apuntes.

Pero bueno, centrémonos. Venía a hablar de un evento que me encanta y que, seguramente, todo lector habitual encontrará como mínimo atractivo: la feria del libro. Incluso para aquél que no disponga de mucho dinero que gastarse en esos suculentos ejemplares que te ofrecen desde todos los ángulos, como en una especie de buffet libre (no tan libre) de lectura, simplemente pasearse por los rincones de una feria del libro hojeando, leyendo sinopsis, descubriendo autores antes desconocidos, planeando nuevos títulos que añadir a la cola de "libros por leer" y demás posibles actividades que uno se encuentre por casualidad... no tiene precio, desde luego que no (¡Y menos mal!). El ambientazo que se incuba durante los días que dura la feria es la razón primordial por la que me gusta tanto. Eso, y que de vez en cuando me encuentro alguna sorpresa agradable.
Desde hace años, tengo la ilusión pendiente de ir a la Feria del libro de Madrid. Es una cuenta pendiente que tengo, una de estas cosas que, a pesar de no estar fuera de tu alcance, siempre surge algo que echa a perder los planes para llevarla a cabo. Este año iba a ser el definitivo, ¡y además podía ir justo el fin de semana en que podría ver a Laura Gallego, que por fin ha salido de su retiro mediático! Pero al final se me torcieron las fechas y de nuevo me es imposible ir. Planchazo. A ver si para el año que viene puede ser.
Pero bueno, al menos pude consolarme con la Feria del libro de Sevilla. Que tampoco está mal, aunque creo que podría estar mejor. Aparte, entre otras cosas, podrían encontrar un sistema de organización que permitiera colgar en la web oficial las actividades y el listado de autores que van a firmar libros en ella con un tiempo razonable de antelación. Un día que me dio por consultar la página por casualidad, me encontré que por fin habían actualizado con la información de las firmas y me llevé la grata sorpresa de la que hablaba al principio.
Care Santos venía a firmar el domingo. ¡Por fin! Llevo un tiempo siguiendo los pasos literarios de esta escritora. No me he leido todos sus libros ni mucho menos, pero sí algunos de ellos que me han bastado para aficionarme a su estilo. Tengo hasta uno de sus relatos cortos pegado en mi armario, recortado de las páginas de una revista hace años. El corazón del monstruo se llama. El año pasado gané un ejemplar de Crypta firmado por ella, en un concurso que organizó vía blog, pero yo quería una firma en persona. ¿Qué es una firma sin la persona que la estampa? Poco menos que un garabato. Conocerla en persona y hablar con ella era otro cantar, así que allá que fui el domingo con mi ejemplar de Habitaciones cerradas (su nueva novela) bajo el brazo.

Por suerte no había mucha gente esperando; de hecho, había tan pocas personas alrededor que me llevé unos minutos de pie al lado de la autora y ni Herneith ni yo nos dimos cuenta de que era ella hasta que le preguntamos a la encargada del stand que si andaba cerca (qué queréis que os diga, a veces las gafas de sol cambian la cara de las personas una barbaridad). En resumidas cuentas, Care me pudo atender en seguida y fue muy agradable. Le conté que yo había sido una de las ganadoras del concurso de Crypta (y descubrí lo raro que suena decirle a alguien en persona "Yo soy Cucaracha"). Me avisó que Habitaciones cerradas era bastante distinto a Crypta y nos contó su impresión sobre los lectores jóvenes, que devorábamos libros de todos los estilos. Al final me fui de allí con una gan sonrisa y con mi dedicatoria, dirigida esta vez a mi nombre y no a Cucaracha, y Herneith también volvió con su La muerte de Venus firmado. Definitivamente, me encantan las firmas de libros y conocer a los autores.

Y seguimos hablando de libros. Aprovechando estos eventos literarios me he auto-regalado algunos títulos, entre ellos Palabras envenenadas, de Maite Carranza, el cual me despertaba curiosidad. La lectura se me ha hecho corta pero bastante intensa.

La novela trata un tema delicado como es el abuso de menores de mano de una chica, Bárbara, que lleva años encerrada y sin ver la luz del sol y a quien todos dan ya por muerta tras su desaparición. La narración pasa por el punto de vista de la secuestrada, haciéndonos partícipes de los horrores que ha vivido y sentido durante su encierro. Por otro lado también tenemos la narración de la madre de Bárbara, de su amiga de la infancia y del inspector encargado de la fallida investigación del caso, ya al borde de la jubilación. La narración oscila entre unos y otros, mostrándonos desde dentro y desde fuera los horrores que giran entorno al caso de Bárbara y dejándonos caer con cuentagotas retazos de los acontecimientos previos que desembocaron en la tragedia.
Al principio el estilo me llamó la atención, pues los diálogos se integran dentro de una narración en primera persona sin guiones ni separaciones. Es algo a lo que no estoy acostumbrada pero, una vez me hice al cambio, me di cuenta del toque intimista que ofrecía este recurso. Si se lleva bien, no resulta confuso ni pesado, y creo que es un obstáculo superado en Palabras envenenadas. Ya habré mencionado más de una vez lo mucho que me gusta la obra de Maite Carranza, cómo se nota el mimo en los detalles y esos matices que, creo yo, sólo la experiencia puede proporcionar. En este caso me he sentido transportada de lleno a la mente de cada uno de los narradores, creyendo lo que ellos creían, viendo el mundo desde sus ojos. Tanto es así que el final me cogió por sorpresa; a pesar de haber considerado esa opción, los personajes consiguieron marearme la perdiz y confundirme, llevándome por los mismos caminos erróneos que ellos recorrieron hasta dar con la clave correcta. 
Concluyo remarcando que Palabras envenenadas es una historia triste dentro de una temática dura, desarrollada de forma conmovedora y efectiva que podría servir de reflexión al lector, o simplemente revolcarlo en la amarga verdad de que vivimos en un mundo lleno de enfermos.

Bueno, tras la crónica y la mini-reseña me retiro de nuevo al silencio bloggero. Puf, cuánto de menos echaba reseñar libros. Me horroriza el poco tiempo que tengo para leer durante el curso, en serio.

¡Nos vemos!